lunes, 16 de octubre de 2017

LA HISTORIA DE LA AFRO CUBAN ALL STAR
La vida es como una bicicleta. Para mantener el equilibrio tienes que seguir adelante. Albert Einstein.
Vivimos de prisa, demandando, cumpliendo, todo debe ser rápido e inmediato, la vida se nos pasa y en muchos casos no nos percatamos de ello, los hijos crecen, los años van sumando, los deseos cambian y un día nos damos cuenta que todo fue una eterna carrera.
La reflexión nos sirve para poder tomar buenas decisiones, siempre es bueno tomar un tiempo para relajarse, para pensar y para despejar la mente.
ASÍ ES LA HISTORIA:
Por la posición geográfica de Cuba, y especialmente de La Habana, siempre ha sido un país con vocación cosmopolita, dispuesta a recibir y dar células culturales; eso es especialmente importante en la música, que siempre ha tenido dos ingredientes esenciales que le han abierto la puerta en el resto del mundo: conservación de lo tradicional, pero al mismo tiempo, innovando siempre. La proporción en que esos dos elementos se funden en cada ocasión histórica, es el secreto que sin darse cuenta, llevan dentro nuestros compositores e intérpretes.
“Afro Cuban All Stars” Pertenece al grupo de grabaciones que realizó Ry
Cooder (Louisiana, 3/15/1947) en Cuba en marzo de 1996. Cooder es un guitarrista que anteriormente había hecho trabajos de tipo folklórico. Con la ayuda de un músico cubano, Juan de Marcos, reunió un grupo con el que produjo tres albumes, este, Buenavista Social Club y otro del pianista Rubén González. Aparentemente, Ry iba a Cuba con el propósito de grabar con un grupo de músicos africanos y los cubanos, pero aquellos no pudieron ir. De Marcos reunió entonces un grupo, en que la figura principal era Compay Segundo, con contrato con otras empresas. Al parecer, se consiguió autorización para que apareciera en unos de los compactos, el de Buenavista. Ya hemos hablado del Compay en la sección correspondiente a él. El grupo
formado para las grabaciones, pomposamente llamado Afrocuban All Stars, es una mezcla de músicos viejos y jóvenes que incluye a los cantantes Ibrahim Ferrer, Pío Leiva, Manuel “Puntilla” Alicea, Raúl Planas, José Antonio “Maceo” Rodríguez y Félix Valoy. De algunos de ellos, los importantes, hablamos bajo sus respectivos nombres. Como tresista y director del grupo, Juan de Marcos González, Rubén González, p.; Cachaito López, bajo; Luis Alemañy, Manuel “Guajiro” Mirabal y Daniel Ramos, trp.; Carlos Alvarez y Demetrio Muñiz, trb.;
Javier Zalba, sax y fl.; Miguel “Angá”, cg.; Julienne Oviedo, timb.; Carlos González, bg.; Alberto Virgilio Valdés, mar.; y Carlos Puisseaux, güiro. En los coros, Virgilio Valdés, Luis Barzaga y De Marcos. Ry Cooder tocó la guitarra en Alto Songo, Richard Egües la flauta en Habana del Este, y Barbarito Torres el laúd en Amor verdadero. Los arreglos son de De Marcos.
Amor verdadero / gj-s Ch. Marquetti P
Alto songo / s-mt LMG RP, PL,
P, JA
Habana del Este / dzt-ch DR ins
A toda Cuba le gusta / s RB RP
Fiesta de la rumba / gg DR FV
Los Sitio’ asere / gg Silvio Pino FV, JA
Pío mentiroso / gu M. Ojeda PL
María Caracoles / moz P. Afrokán IF
Clasiqueando con Rubén / s DR ins
Elube Changó / s-afro A. Rivero JM
“Buenavista Social Club” Grabado en La Habana en marzo de 1996. De los
anteriores están, Barzaga, Ry Cooder, Ibrahim Ferrer, Carlos González, Rubén González, Puntillita, Cachaito, Julienne, Mirabal, Barbarito, Virgilio Valdés. Y se agregan como nuevos el hijo de Cooder, Joachim, perc.; Julio Alberto Fernández, mar.; Salvador Repilado, bajo; Benito Suárez, g.; Lázaro Villa, güiro, y tres elementos importantísimos: la cantante Omara Portuondo (OP), el tresista y cantante Eliades Ochoa (EO), y el ya en ese momento legendario Compay Segundo (CS). Era un grupo más pequeño, más homogéneo donde
primaban los músicos de avanzada edad. Lanzado en 1997, a los diez meses casi alcanzaba el millón de ventas. Al recibir el Grammy en 1998, las ventas siguieron alcanzando cifras increíbles. El grupo se presentó en el Carnegie Hall, hizo giras y gran parte de este material fue recogido por el director Wim Wenders en un documental que alcanzaría a su vez marcas altísimas de ventas. El librito que acompaña al compacto, como el anterior es bilingüe y trae las letras de las canciones, y afortunadamente está escrito en letra legible y sobre fondo blanco (cosa que no sucede siempre en los compactos, en que a veces es imposible leer los textos).
Pero tiene errores importantes, entre otros: Luis Marquetti murió en 1991, no en 1996, como dicen las notas (p.3); El danzón Pueblo Nuevo es de la autoría de Cachao, no de Rubén González (p.4). Machín murió en Madrid en 1977, y no en Sevilla en 1995 (p.5); Delfín hizo sus primeras grabaciones en 1923, no en 1922 (p.6) y Buenavista Social Club es de Cachao, no de Orestes López (p.13).
Chan chan / s C. Segundo EO
De camino a la vereda / s I. Ferrer IF
El cuarto de Tula / s LM EO
Pueblo nuevo / dz C ins
Dos gardenias / b IC IF
Y tú qué has hecho / b ED CS
Veinte años / b MTV OP
El carretero / gj G. Portabales EO
Candela / s-tumbao F. Oramas IF
Amor de loca juventud / b RO CS (dúo)
Orgullecida / b E. Silveira CS (dúo)
Murmullo / b ER IF
Buenavista Social Club / dz C ins
La Bayamesa / cr SG P
En definitiva esto es una discografía. Pero
por la importancia que tuvo este disco, creemos se debe hacer un breve comentario.
CRISTOBAL DIAZ AYALA:
Lo bueno de la producción de Buenavista Social Club, y los otros compactos producidos por el Sr. Cooder, es que le dieron un impulso extraordinario al boom de la música cubana, que ya era un hecho cuando salieron estos discos, pero que indudablemente ayudaron a su mayor difusión. Lo mismo puede decirse de la película, técnicamente magnífica como documento cinematográfico.
Lo objetable a nuestro juicio, es la manipulación de la música y músicos cubanos por el Sr. Cooder. Este llega a Cuba con la idea de hacer un proyecto mixto con músicos cubanos y africanos y al no poder efectuar, improvisa felizmente usando artistas ya conocidos mundialmente, como Compay Segundo y Eliades Ochoa, y Omara Portuondo, otros importantes cantantes cubanos pero sin nombre en el extranjero como Puntillita, Pío Leiva y Raúl Planas, y un cantante de segunda línea, poco conocido aún en Cuba, Ibrahim Ferrer.
Como trata de vender un producto que tenga acogida en el mercado de world music, “americaniza” tres de las interpretaciones, para hacer su música atractiva a ese público; dice que el género musical de “Amor de loca juventud” es “Influencia americana/gospel/blues”. No existe ese género musical, y se trata de un bolero interpretado en forma adulterada, con la guitarra hawaiana de Cooder, que no tiene nada que ver con la música cubana. Lo mismo sucede con Orgullecida, otro bolero que se canta en forma artificial y que se
presenta como “influencia americana/jazz”. Y así también sucede con Murmullo, otro bolero que caprichosamente califica de “balada”.
Para atemperarse a las voces de sus compañeros, Omara Portuondo tiene que rebajar los tonos y el volumen de su voz; si se escucha su versión de Veinte años cantada aquí con la que hizo con la orquesta de Adalberto Alvarez, o el compacto grabado con Chucho Valdés en 1997 “Desafíos” a plena voz, se puede apreciar esto.
Es posible que por razón de compromisos con otros sellos, Cooder no pudiese usar en grabaciones posteriores a Elíades Ochoa y Compay Segundo; pero de todos los cantantes que usó el que escoge para su siguiente grabación, es el menos importante: Ibrahim Ferrer; ¿Por qué?. DIAZ AYALA.
RY COODER YENDO A LA CONTRA
Conoció los años de vacas gordas y, en la práctica, gozó del mecenazgo de Warner: allí edita discos desde 1970 (actualmente está en Nonesuch, el sello-de-prestigio de la multinacional). Su música siempre fue contracorriente: exploraciones en el blues o en el folk, incursiones en el tex-mex y la música hawaiana. Discos que vendían cantidades modestas pero de producción costosa.
dio el pelotazo en 1997 con Buena Vista Social Club, un proyecto inventado sobre la marcha, cuando la burocracia impidió juntar a músicos africanos con soneros cubanos (cuando finalmente se hizo, resultó que la idea tenía patas cortas). Pero, incluso antes, Cooder disfrutó de carta blanca para grabar lo que le apetecía, una libertad de la que no disponían compañeros de sello como, no es broma, Eric Clapton.
PROFETA EN SU TIERRA.
Juan de Marcos González. Músico cubano catalogado como profeta de la música cubana de fin de siglo XX. Fue el productor de la idea de la orquesta Afro Cubans All Stars que grabó el disco Buena Vista Social Club, Premio Grammy 1997, en la categoría de Música Tropical.
Esperando este documento les haya servido en su investigacion
Omarlorenzo
gracias